Chuck Baldwin (4), Paweł Zasadny, Gonzalo Jiménez, Alex Pérez, Mario Diez y Kevin Mooney anotaron los goles locales, mientras que Alberto Bernabéu (3), Sergio Calderón (2), David Alejandro Pérez y Raúl de la Hoz, fueron los goleadores del Tres Cantos PC (10-7
Partido de locura el que se ha vivido esta noche sobre la pista del Polideportivo Carlos García San Román, en un partido abierto en el que el Molina Sport y el Tres Cantos PC protagonizaron una embriagadora borrachera de goles que se decantó en favor del anfitrión que sumó su decimoquinta victoria liguera consecutiva (10-7).
Menos de cuatro minutos tardó Chuck Baldwin a pase de Kevin Mooney en inaugurar el marcador, duplicando su botín apenas un minuto después en una jugada individual del Pichichi de la Liga Élite que encauzaba el partido para el Molina Sport (2-0).
Tres Cantos a pesar de los dos golpes encajados no renunciaba al ataque en busca de un gol que les metiese en el partido, pero era el conjunto amarillo a través de su capitán, Pawel Zasadny, quien aumentaba su renta al culminar una acción individual (3-0).
Sin embargo, el esfuerzo de los madrileños encontraría su recompensa poco después en un buen pase de Eric Mbeinjock que Raúl de la Hoz aprovecharía para batir a Javi Tordera (3-1).
El tanto del Tres Cantos espoleaba los ánimos de un Molina Sport que apretaba en ataque para llegar al ecuador del choque con otros tres tantos en su marcador, tras marcar Guillermo Jiménez, Alex Pérez y Mario Diez en la portería madrileña (6-1).
Tras el paso por vestuarios, el conjunto capitalino salía respondón y aprovechaba para recortar diferencias con dos tantos de Sergio Calderón y Alberto Bernabéu, que les metían de lleno en la pelea por el triunfo (6-3).
Chuck Baldwin aumentaba la renta de los amarillos, pero el Tres Cantos perforaba por tercera vez la meta grancanaria con dos nuevos tantos de Alberto Bernabéu y David Pérez (7-5).
El Molina se remangaba y no rehuía el intercambio de golpes. Jan Andrysek volvía a marcar para los anfitriones, pero Alberto Bernabéu repetía para los madrileños (8-6) y Kevin Mooney solicitaba un tiempo muerto para reajustar su defensa.
El propio entrenador-jugador de los amarillos volvía a marcar, pero Sergio Calderón hacía lo propio para los madrileños, antes de que el killer de la Liga Élite, Chuck Baldwin apareciese en escena para cerrar el marcador final en un 10-7 que les daba la decimoquinta victoria consecutiva.
